Escribe también un gran número de obras de teatro, la mayor parte de ellas en colaboración con su gran amigo Ángel Torres del Álamo, que reflejan con gracia e ingenio la vida madrileña, los personajes castizos femeninos y las clases populares. Entre las casi más de setenta obras, muchas de ellas sainetes y comedias, se pueden mencionar títulos como: El chico del cafetín (1911) obra premiada en un concurso del Ayuntamiento de Madrid, Margarita la Tanagra (1917), Rocío la canastera (1919), Las pecadoras (1920), Los hijos de la verbena (1924), Los polvos de la madre Celestina (1935). Acompañan a estas obras, en algunos casos, partituras del maestro Calleja y música de Font, de Pablo Luna y de Foglietti. Muchas de ellas se agrupan en tomos que tienen por título: ¡Postinerías!, Chulapas y chulapones y La vida…en chufla. En 1934, el Ayuntamiento de Madrid otorga el premio Lope de Vega a los dos dramaturgos.
En 1929 es nombrado director de la Hemeroteca Municipal de Madrid, fundada en 1918 por Francisco Ruano y Carriedo, al fallecer su director Ricardo Fuente, junto al que había colaborado arduamente en su puesta en marcha. Realiza importantes adquisiciones, fomenta las donaciones, organiza y publica los catálogos y convierte la Hemeroteca en una importante institución a la que lleva a las exposiciones de Colonia y Sevilla con gran éxito. Es la gran obra del autor y a la que dedica mucho tiempo y trabajo. Publica en 1928 la Memoria y catálogo de las publicaciones presentadas por la Hemeroteca a la Exposición Internacional de Colonia y el Índice de las publicaciones antiguas y modernas.
En el inicio de la Guerra Civil, encontrándose de forma provisional en Salamanca, intenta organizar también la Hemeroteca de esta ciudad y la de Burgos, recopilando toda la prensa del bando nacional. Estos fondos, junto a los recogidos en la Hemeroteca de Madrid del bando republicano, se fusionan al final de la Guerra formando una colección muy completa de este período histórico.
En 2018, una exposición conmemorando el centenario de la Hemeroteca Municipal de Madrid recuerda la placa realizada en 1935 en honor de los fundadores, siendo en ese momento director de la institución Antonio Asenjo. Actualmente una de las salas de la Hemeroteca lleva su nombre.
Fallece en Madrid el 19 de febrero de 1940 y es enterrado en la Sacramental de San Isidro.
(Servicio de Información Bibliográfica)