Weeding the Zs: a collaborative rightsizing project in a large academic library

Julia Proctor

The serials librarian, ISSN 1541-1095, Vol. 81, n. 3-4, 2021, p. 239-245

En 2018, la red de bibliotecas de la Penn State University (PSUL) comenzó un proceso para redimensionar su colección como parte de la renovación del campus. Se inició un proyecto de expurgo colaborativo para los ítems con signatura Z de la clasificación de la Library of Congress, que pertenecen a Bibliografía y recursos de Biblioteconomía, con la intención de establecer unos criterios y un procedimiento que fueran útiles en futuros proyectos de expurgo. La red de bibliotecas de la PSUL está formada por 36 instalaciones. El edificio principal tiene unos fondos de 1.623.358 monografías y 499.816 publicaciones periódicas. El proceso de expurgo no solo consiste en identificar títulos para su deselección, sino también en mover todos los libros que permanecerían. Con esto en mente, una de las recomendaciones del grupo de trabajo fue hacer del expurgo un proyecto estratégico que implicara a toda la biblioteca. La autora realizó un boceto para la deselección basándose en lo establecido por el grupo de trabajo y en la bibliografía sobre la materia. Los criterios que incluyó fueron: circulación (serían candidatos a retirarse los libros no prestados en los últimos diez años); disponibilidad (títulos representados en más de 20 instituciones); fecha de publicación (libros con más de 20 años de antigüedad); valor de investigación (con un valor significativo en determinada materia deberían mantenerse). El SIGB de PSUL es SirsiDynix Workflows, y también está suscrita a su herramienta de gestión de colecciones BlueCloud Analytics (BCA). La autora obtuvo una lista de las monografías de la clasificación Z con esta herramienta y con la utilización de Z39.50 pudo comprobar su disponibilidad en otras bibliotecas a través de WorldCat. La autora creo una columna junto a la información bibliográfica incluyendo la recomendación de mantenimiento/retirada siguiendo los criterios de deselección. Esta lista fue revisada por bibliotecarios de materia de la PSUL, quienes devolvieron la lista con sus recomendaciones. Finalmente, se retiró el 45% de las monografías. El proyecto se consideró un éxito en su conjunto, al establecer criterios para el expurgo, un consenso entre los miembros de la biblioteca y retirar un número significativo de ítems. Habitualmente el expurgo se ve con miedo o disgusto entre los profesionales, pero en realidad la deselección es tan importante como la selección. El mantenimiento de la colección es muy costoso y además mantener libros viejos en las estanterías que impiden tener espacio para nuevos contenidos impide un buen servicio a los usuarios.

https://www.tandfonline.com/doi/full/10.1080/0361526X.2021.1995927