Carlos Díaz Redondo

Archivamos : revista trimestral de actualidad de archivos y documentos, ISSN 1576-320X, n. 134, 2024, p. 48-51

A partir del siglo XIX, con la modernización de los sistemas de producción masiva de los libros, las telas utilizadas en la encuadernación de ciertos ejemplares pasaron de teñirse con pigmentos naturales a hacerlo con metales pesados y aminas cancerígenas altamente perjudiciales para la salud, como así pasó con el llamado “verde de París”, el “azul de Prusia” o el “amarillo de cromo”. Este artículo describe los casos detectados en la Winterthur Museum, Garden and Library de Delaware, Estados Unidos y el trabajo en colaboración que desarrollaron con la University of Delaware lanzando finalmente el “Book Poison Project”, cuyo principal objetivo era localizar y estudiar esos volúmenes y facilitar una serie de pautas para que se almacenen y conserven de forma correcta y segura, creándose una base de datos colaborativa que ha permitido intercambiar información con más de cincuenta instituciones culturales en todo el mundo.