El pasado lunes tuvo lugar en el Palacio de Bibliotecas y Museos de Recoletos una acción preventiva y pedagógica frente a la COVID-19 en la que participaron, entre otros, técnicos el ministerio de Cultura y Deportes y efectivos de la Unidad Militar de Emergencias especializados en riesgos nucleares, radiológicos, biológicos, químicos, el Museo Arqueológico Nacional y la Biblioteca Nacional de España.

La idea fue planteada por Angel Luis de Sousa, coordinador del Plan Nacional de Gestión de Emergencias en Patrimonio Cultural después de la elaboración la Nota de Alerta y las Recomendaciones del Instituto de Patrimonio Español (IPCE) sobre acciones de limpieza y desinfección del patrimonio histórico-artístico frente al virus SARS-CoV-2. El planteamiento era  poner en práctica  una acción sobre un inmueble patrimonial de referencia que permitiera evaluar las dificultades de aplicación de los protocolos en un escenario real. Para ello pone en un escenario real algunos de los protocolos que se están recomendando, que alberga a dos importantes instituciones culturales del ámbito del Ministerio de Cultura y Deporte: la Biblioteca Nacional de España (BNE) y el Museo Arqueológico Nacional (MAN).

La acción se ha desarrollado dentro del marco de la “Operación Balmis”, y se ha ceñido estrictamente a las recomendaciones del IPCE. Con ella se establecieron los procedimientos más adecuados para asegurar los accesos al edificio antes de su reapertura. Gracias a este trabajo, fue posible ensayar la metodología y los criterios de actuación que deberán ser aplicados en otras instituciones culturales similares.

El trabajo desarrollado consistió en una acción de limpieza previa y posterior desinfección de zonas y elementos en uso y contacto habitual con los ciudadanos y se completó con el balizado de itinerarios, la protección de elementos patrimoniales accesibles y su conveniente señalización como tales.

El ámbito de la acción se centró en dos zonas bien definidas y diferenciadas: por un lado, el perímetro exterior del inmueble, desde la valla de cerramiento y las rejas de ambas entradas, hacia afuera; y por otro, los dos amplios espacios de acceso principal a las respectivas instituciones.

En el perímetro exterior un equipo compuesto por hasta cuatro efectivos de la UME y dos restauradores realizaron una limpieza del pavimento de las aceras en una franja de 1,5 m desde el arranque del zócalo de granito de la valla de cerramiento y del mismo zócalo empleando una autobomba provista de una lanza de presión regulable que aplicaba agua desmineralizada con una presión de salida de 2 bares a más de 1 metro de distancia para reducir el riesgo de daños en zonas sensibles. El agua sucia que arrastraba la suciedad, los restos vegetales y demás residuos se condujo hasta los desagües de la calzada con ayuda de escobas.

Una vez concluida la limpieza, se procedió a la desinfección de las superficies tratadas con una disolución de etanol al 70%, aplicada con mochilas de nebulización. Dado que este cerramiento perimetral está calificado como elemento patrimonial, se colocaron carteles a lo largo de la valla, advirtiendo de su naturaleza y disuadiendo del contacto directo.

En cuanto a los recorridos de acceso a ambas instituciones, se balizaron con cinta plástica las zonas e itinerarios de circulación limitados al trasiego de personal y público, excluyendo las zonas ajardinadas. Los elementos como pasamanos, barandillas, catenarias, picaportes, etc., se limpiaron y desinfectaron manualmente, con pulverizadores y trapos.

Participaron en este ejercicio los siguientes efectivos:

Por parte del Grupo de Intervención en Emergencias Tecnológicas y Medioambientales

• 36 efectivos de la Unidad Militar de Emergencias
• 4 vehículos VW Amarok
• 1 vehículo VAMTAC con Remolque con hidrolimpiadora
• 1 Furgoneta DEVAC
• 1 Camión IVECO M250
• 1 Autobomba:
• 2 vehículos VW Amarok y 2 motocicletas de la Policía Militar.

El personal se organizó de la siguiente manera:

• 1 equipo de balizamiento.
• 1 equipo de limpieza exterior con autobomba y cepillos.
• 1 equipo de limpieza interior con hidrolimpiadora y cepillos.
• 4 equipos de desinfección con mochilas pulverizadoras.
• 2 equipos de logística para rellenar mochilas de etanol y otras tareas de apoyo.
• 2 equipos de Policía Militar para apoyo a la policía municipal.

Por parte del Ministerio de Cultura y Deportes, participaron:

• 1 coordinador y dos asistentes en representación del MAN y BNE
• 8 restauradores de la BNE, IPCE y Dirección General de Bellas Artes
• Personal de mantenimiento y seguridad de la BNE, MAN y Ministerio de Cultura y Deportes.

Hay que destacar el buen desarrollo de la actuación y la repercusión en los medios de comunicación. Agradecemos a la UME su excelente actuación y las facilidades prestadas para la realización del ejercicio que creemos, ha marcado una pauta en el desarrollo de actuaciones coordinadas para la protección el patrimonio cultural en esta crisis provocada por la pandemia. Así mismo, agradecemos a los participantes del Ministerio de Cultura y Deportes, Instituto de Patrimonio Cultural de España, Museo Arqueológico Nacional y Biblioteca Nacional el esfuerzo realizado al poner en marcha este ejercicio.

Ángel Luis de Sousa y Arsenio Sánchez Fotografías: Pilar Montero