La escuela de Parma toma como punto de partida los efectos de luz y color de los dibujos de Correggio, a menudo en lápiz rojo, que aúnan el sfumato leonardesco con la grazia rafaelesca.

Parmigianino, así llamado por su ciudad natal, fue conocido como "el nuevo Rafael"; se inspiró en Correggio, pero sus dibujos tienen un fin experimental y una rara y personalísima caligrafía. Los también parmesanos Mazzola Bedoli y Bertoja seguirán la estela del maestro.

Como describe Antonio Geremicca, este dibujo a lápiz rojo representa una figura femenina genuflexa cuyo busto está girado en una ligera torsión con el objeto de acompañar el movimiento de los brazos extendidos hacia el muslo izquierdo, sobre el que la mujer aferra un objeto con las manos, tal vez un libro o un frasco de ungüento. Aunque no se ha podido relacionar este boceto con ninguna obra conocida de Parmigianino, son muchos los dibujos que, desde el punto de vista técnico, son similares a la figura en estudio y cuya realización puede ubicarse en la segunda mitad de los años veinte del siglo XVI.