Sigea, Luisa
Sigea, Luisa

- Ensayistas y prosistas
Humanista, escritora y políglota, Luisa Sigea de Velasco nació en 1522, en Tarancón (Cuenca), población entonces perteneciente al Reino de Toledo, de ahí que fuera conocida con el apodo de Toledana.
Gozó en su tiempo de fama y reconocimiento, algo particularmente difícil para las mujeres de la época, por su erudición clásica y su conocimiento de lenguas.
Hija de Francisca de Velasco, dama perteneciente a una ilustre familia de Tarancón y de Diego Sigeo, de origen francés y preceptor de la comunera María Pacheco, esposa del general Juan de Padilla, quien murió ajusticiado en 1521, tras la derrota comunera en Villalar contra Carlos V. En 1522, debido a estos acontecimientos, se trasladó a Portugal, acompañando en el exilio a Pacheco, y no fue hasta 1536 cuando mandó llamar a su familia para que se reunieran con él. Por lo tanto, Luisa pasó su infancia en la localidad conquense. Tuvo una hermana, Ángela, que destacó en el campo de música, y dos hermanos.
De su padre, tanto Luisa como su hermana Ángela, recibieron una esmerada educación, muy por encima de la limitada formación que recibían las mujeres de su época y que incluía aspectos como la música, arte en el que alcanzaron el virtuosismo, y las lenguas clásicas. Luisa dominaba el latín y el griego, y con el tiempo amplió sus conocimientos al hebrero, el árabe y el sirio, además las lenguas modernas como el portugués, el francés y el italiano. Así mismo, disponían de una de las mejores bibliotecas del Renacimiento en Portugal.
En 1542 entró, junto a su hermana Ángela, al servicio de la reina Catalina de Austria y de Portugal, esposa del rey Juan III. La reina había conseguido crear una corte culta y destacó como una de las impulsoras del erasmismo en Portugal. Más tarde, en 1552, entró en el servicio de la infanta María de Portugal como preceptora. Durante este periodo Luisa pudo profundizar en sus estudios humanísticos, lo que la convirtió en representante de ese grupo de mujeres cultas que instruyeron a damas de la nobleza en diferentes cortes europeas, conocidas como puellae doctae, que se caracterizaban por ser mujeres pertenecientes a las clases privilegiadas, instruidas en el conocimiento de la cultura humanística y las lenguas clásicas.
Su obra
Al servicio de la Infanta María, quien quiso rodearse de estas mujeres eruditas entre las que se encontraban las hermanas Sigeo, compuso sus dos mejores obras. Su primer poema titulado Syntra, dedicado a la infanta y en el que hace una descripción fabulada de dicha ciudad, lo envió al papa Pablo III, acompañado de una célebre carta en cinco idiomas, que fue contestada por el propio papa, motivo por el cual adquirió gran popularidad. Syntra fue publicado póstumamente en 1566 en París, por iniciativa de su padre y en 1878 fue traducido al castellano por Marcelino Ménendez Pelayo.
La segunda de sus obras mayores es Coloquio de dos doncellas sobre la vida áulica y la retirada, un diálogo datado en 1552, con el título de Duarum virginium colloquium de vita áulica et privata, en el que da testimonio de la vida en la corte y con la intención didáctica de mostrar cuál es la mejor y más feliz forma de vida, si la áulica o la vida retirada.
Ese mismo año se acordó su matrimonio con Francisco de las Cuevas, un culto hidalgo burgalés con el que se instaló primero en Torres Novas. Juntos trabajaron en la corte de la infanta hasta 1555 momento en que por razones desconocidas se trasladan a Burgos. Desde allí incrementa su producción epistolar, intentando encontrar una salida profesional a sus conocimientos. Estas cartas le servían para destacar su trayectoria y su dedicación al estudio, presentándose, ante la nobleza que debía darle trabajo, como una mujer culta e inteligente. Se trata de un periodo en el las dificultades económicas y la falta de reconocimiento le provocaron un fuerte desánimo. Desde Burgos envió cartas a Felipe II y a su esposa, Isabel de Valois, destacando sus méritos y sus servicios, pero nunca recibió respuesta.
A finales de 1556, María de Austria, hermana de Carlos V y tía de María de Portugal, conoció a Luisa a su paso por Burgos de camino a Valladolid y la incorporó a su séquito como dama latina y a su marido como secretario. Sin embargo, estos cargos sólo duraron un año debido al fallecimiento de la reina María.
En agosto de 1557 bautizó a su hija, Juana de Cuevas Sigea, y el 13 de octubre de1560 falleció en Burgos.
Después de su muerte, su padre promovió la publicación de Syntra, que se publicó en París, en 1566.
(Servicio de Información Bibliográfica)
Cronología
Nace en Tarancón
La familia se reencuentra con el padre en Portugal
Escribe el poema Syntra
La pareja se traslada a Burgos
Bautismo de su hija Juana
Preceptora de la infanta María de Portugal
Entra al servicio de la reina Catalina de Austria y Portugal
Escribe Coloquio de dos doncellas sobre la vida áulica y la retirada y contrae matrimonio con Francisco de las Cuevas
Se incorpora al séquito de Isabel de Valois
Fallece el trece de octubre en Burgos
- Baranda Leturio, Nieves. “Sigea, Luisa”. En: Diccionario biográfico español, Tomo XLVI, p. 785-788. Madrid: Real Academia de la Historia, 2009-2013
- Garrido de la Torre, Virginia. Catálogo de obras de Luisa Sigea de Velasco: donadas por Don Antonio Escamilla Cid al Ayuntamiento de Tarancón. [Tarancón]: Ayuntamiento de Tarancón, D.L. 2017
- Enciclopedia universal ilustrada europeo-americana. Madrid: Espasa-Calpe, 2005. Vol. LVI. p. 37-38
- Fernández Urtasun, Rosa. “Michels de Champourcin y Morán de Loredo, Ernestina de”. En: Diccionario biográfico español, Tomo XXXV, p. 59-61, Madrid: Real Academia de la Historia, 2009-2013
- Muñoz Romero, Jesús. Vida y obra de Luisa Sigea Toledana. Toledo: Ledoria, 2020