Del buen uso de la anotación manuscrita
Christine Bénévent
Bulletin du bibliophile, Vol. 2, 2010
La autora del artículo ve la anotación en el libro como la huella que deja el lector dándole valor añadido y se cuestiona la legitimidad de esta práctica que puede deteriorar la obra- todas las bibliotecas tienen prohibido escribir en sus libros-. Se pregunta si el libro mas valorado debe de estar impoluto como en el s. XVIII, obsesionado por la pureza sin dudar en lavarlos ó mutilarlos si era necesario para presentarlos como nuevos ó por el contrario será mas valioso el que lleve las huellas vivas de su pasado de libro leído que se ofrece al lector enriquecido"autografiado" diferenciando la nota anónima de la del hombre ilustre- a finales del s.XX también se da importancia a la nota anónima que muestra la evolución de la mentalidad de sus lectores-. El libro es testimonio del saber de una época que se anota , de una práctica del lector. El humanista es fundamentalmente anotador de libros. La revolución del libro electrónico modifica las técnicas de reproducción del texto, las estructuras y las formas de soporte, variando el modo de lectura. La posibilidad de usos múltiples, imagen, texto, hipertexto... Se cuestiona la capacidad de intervención en un texto interactivo.
Resumen elaborado por: María Jesús Maestre Adán