[Proyecto de decoración para una bóveda]
Claudio Coello es uno de los últimos grandes pintores de la escuela barroca madrileña de la última parte del siglo XVII. Su actividad coincide con el reinado de Carlos II. De familia portuguesa, se forma en el taller de Francisco Rizi, según nos relata Palomino, y pronto destaca por sus aptitudes artísticas que, en 1686, le convierten en pintor de cámara. Trabaja fundamentalmente como pintor, aunque también participa en la preparación de arquitecturas efímeras para alguna entrada triunfal en la corte, como la efectuada en Madrid para María Luisa de Orléans. Este dibujo, atribuido a Claudio Coello, hay que situarlo bajo la influencia del dibujo arquitectónico de quadratura, propio de la escuela boloñesa. A. M. Colonna y A. Mitelli fueron sus introductores en España (1658) al ser llamados por Velázquez para decorar el Alcázar de Madrid.
Consiste en la aplicación, sobre muros o techos, de arquitecturas fingidas, contempladas desde un punto de vista bajo (di sotto in sù), que, aplicadas al fresco o al temple, adornan los muros y techos de palacios y templos. Se sabe que Coello conoció y aplicó esta técnica mural tanto en Madrid como en Zaragoza, donde en los años 1683 y 1684 decoró el colegio agustino de Santo Tomás de Villanueva (La Mantería).