La gestión de datos de investigación en el horizonte de las bibliotecas universitarias y de investigación
Julio Alonso-Arévalo
Cuadernos de documentación multimedia, ISSN-e 1575-9733, Vol. 30, 2019, p. 75-88
El aumento del volumen y organización de la información capturada por las empresas y organizaciones, el incremento de los multimedia, las redes sociales y la “Internet de las cosas” están impulsando un crecimiento exponencial de los datos en el futuro. Según estima idC los datos se incrementan un 50% al año, o sea que se duplican cada dos años. Casi todos los analistas consideran “Big Data” como una de las tendencias de futuro que tendrán que tener en cuenta la mayoría de las empresas e instituciones.
Estos elementos relacionados con datos estructurados y no estructurados se pueden dividir en tres categorías distintas: volumen, variedad y velocidad. Un informe del Foro Económico Mundial declaró que los datos constituyen una nueva clase de activo económico, como la moneda o el oro. Según un informe de MGI y la Oficina de Tecnología de Negocios de McKinsey la cantidad de información que genera cualquier actividad pública o privada proporciona grandes conjuntos de datos, y el análisis de estos se ha convertido en una de las bases clave para la competencia en un futuro inmediato que sustentará las nuevas oleadas de crecimiento, productividad, innovación y excedente del consumidor. Un requisito indispensable para todo ello es que los mismos estén accesibles para todos. En este estudio se detalla cuál es la importancia de la gestión de datos, así como la manera de gestionarlos (resaltando la Gestión de Datos de Investigación), cuáles son los principales repositorios, las aplicaciones que tienen y el papel de la biblioteca y los bibliotecarios en su gestión. La adecuada gestión de datos es fundamental para maximizar la utilidad y el valor de los datos de investigación de alta calidad y la investigación de excelencia. Hasta ahora, solo una pequeña parte de las bibliotecas universitarias de Estados Unidos y Canadá ofrecen actualmente servicios relacionados con la gestión de datos de investigación (GDI). Los desafíos son muchos, por eso las universidades que forman a los profesionales de las bibliotecas están introduciendo la curación de datos y la GDI en sus planes de estudios para preparar la próxima generación de profesionales de la información. El objetivo es hacer que el uso de estos datos pueda proporcionar nuevos y valiosos servicios o mejorar la eficiencia. La tarea esencial del profesional de la ciencia en el sector es transformar datos brutos desordenados en conocimiento procesable, para que pueda ser utilizado por los tomadores de decisiones.
Resumen realizado por José María Amate Sánchez