Supporting patrons in crisis through a social work-public library collaboration

Lydia P. Ogden & Rachel D. Williams

Journal of library administration, ISSN 1540-3564, Vol. 62, n. 5, 2022, p. 656-672

Durante décadas, personas con crisis psicosociales han buscado ayuda y refugio en las bibliotecas, y cada vez lo hacen más. Los empleados de bibliotecas interactúan con estas personas utilizando su conocimiento profesional y sus aptitudes, entre las que la intervención en crisis no suele formar parte. Las autoras del artículo tienen la hipótesis de que la colaboración entre bibliotecarios y trabajadores sociales es crucial para el desarrollo de las habilidades de los empleados, lo que mejoraría el servicio público de las bibliotecas. Este estudio analiza los hallazgos de una serie de talleres sobre cuidado de uno mismo, salud mental, gestión de límites y desarrollo de la resiliencia de las bibliotecas públicas. La formación sobre cuidado de uno mismo y resiliencia se centró en el uso de estrategias del área de la psicología positiva. A través de la formación, los empleados aprendieron métodos teóricos y empíricos y participaron en ejercicios que pueden ayudar a identificar estrategias oportunas. El taller se centró en la emoción positiva, la participación, las relaciones, el significado y los logros. También se proporcionaron pautas básicas sobre la salud física, incluyendo higiene de sueño, evitar el alcohol y otras sustancias y una buena alimentación. La actividad más popular fue “Lo que ha ido bien”, en la que se describen tres cosas que han ido bien a lo largo del día. El segundo taller se centró en la comprensión de los límites y su papel en la práctica profesional; en la identificación y debate sobre factores que impactan en la gestión de límites; y en el desarrollo de estrategias para ayudar a establecer límites saludables entre empleados y usuarios. En este campo, los empleados tienen que luchar con tres áreas diferentes: la dificultad de decir no a un usuario cuando hace peticiones que van más allá de las responsabilidades del trabajo; la creencia de que es necesario conservar a los usuarios a cualquier precio; y la dificulta de plantar cara por sí mismos ante la presión de los usuarios. El taller fue muy útil en estas tres áreas. El último taller se ocupó de la interactuación y el apoyo a personas en crisis, con énfasis en la enfermedad mental y la formación en desescaladas. A lo largo del taller, los participantes pulieron su comprensión sobre las enfermedades mentales, aprendieron estrategias para las interacciones de desescalada con una persona en crisis, y participaron en ejercicios para construir empatía con estas personas. Los empleados comprendieron que la manera de interactuar con una persona con una enfermedad mental puede marcar la diferencia.

https://www.tandfonline.com/doi/full/10.1080/01930826.2022.2083442