Kent Siano, Victoria
Kent Siano, Victoria
- Ensayistas y prosistas
- Políticos
Fue la cuarta hija, entre sus seis hermanos, de José Ken (O’Kean) Román, comerciante de tejidos, y María Siano González. En su partida de nacimiento aparece este apellido, si bien utilizó siempre el de “Kent” por la procedencia de sus ascendentes en el condado de Kent, Inglaterra. Pasó en Málaga su infancia y primera juventud, y estudió en la Escuela Normal de Maestras.
Su madre valoraba el valor de la educación, y apoyó a su hija para trasladarse a Madrid en 1916 y terminar el bachillerato para acceder a los estudios universitarios de Derecho en la Universidad Central.
Carrera política
Por influencia de A. Jiménez Fraud y Francisco Bergamín, que conocían a su padre, pudo acomodarse en la Residencia de Señoritas, ligada a la Institución Libre de Enseñanza y dirigida por María de Maeztu, y pudo costearse los estudios enseñando en el Instituto-Escuela de Enseñanza Secundaria, que ella también dirigía. Comenzó entonces su activismo político y feminista en la Asociación de Mujeres Españolas, a la que también pertenecía Clara Campoamor, y al Lyceum Club, del que fue vicepresidenta. Conoció en la Universidad Central a Luis Jiménez de Asúa, profesor de Derecho Penal y amigo personal de la jurista. Realizó su tesis sobre la reforma de las prisiones, y en 1925 se convirtió en la primera mujer del Colegio de Abogados de Madrid. Fue también la primera en intervenir en un Consejo de Guerra, al lograr la libertad de Álvaro de Albornoz, encausado por su apoyo a la rebelión republicana de 1930.
Se unió al Partido Republicano Radical Socialista, liderado por Albornoz, para el que había trabajado como pasante en su bufete. Defensora del divorcio, se opuso sin embargo al voto femenino frente a Clara Campoamor, no por “cuestión de capacidad”, sino por “oportunidad para la República”, convencida de que “la mujer, para encariñarse con un ideal, necesita algún tiempo de convivencia con el mismo ideal”, y que por tanto “cuando transcurran unos años […] y vea la mujer los frutos de la República […], la mujer será la más ferviente, la más ardiente defensora de la República”. Afirmaba así, pues: “Si las mujeres españolas […] estuvieran liberadas en su conciencia, yo me levantaría hoy frente a toda la Cámara para pedir el voto femenino”, y renunciaba a un ideal para defender la prevalencia de la República democrática.
Ocupó el cargo de Directora General de Prisiones entre el 18 de abril de 1931, cuando fue nombrada por Niceto Alcalá Zamora, hasta el 9 de junio de 1932. Coincidía con el humanismo de su admirada Concepción Arenal, Visitadora General de Prisiones de mujeres. A pesar del insuficiente presupuesto con el que contaba, durante su mandato llevó a cabo una de las reformas penitenciarias principales de España: clausuró 322 cárceles de partido judicial y construyó otras nueve, entre la que destaca la Prisión Modelo de mujeres de Madrid, después conocida como “Cárcel de Ventas”, pues además estaba preocupada por la situación aún peor de las cárceles de mujeres, que describió como un “espectáculo de horror”. En los nuevos centros se autorizó la libertad de culto, suprimió la obligatoriedad de acudir a misa, los “cabos de vara”, las celdas de castigo, las cadenas, los grilletes y hierros de sujeción; aumentó la ración alimentaria, instaló buzones de reclamaciones para los presos, autorizó la recepción de toda prensa, mejoró las condiciones higiénico-sanitarias y permitió la salida de reclusos por razones familiares. Creó el Instituto de Estudios Penitenciarios, pues ella apostaba “por un personal apto, preparado, técnico, para la función rehabilitadora que ha de ejercer”. La jurista dimitió ante las duras críticas a sus reformas y la falta de apoyo a las que deseaba llevar a cabo. Tras su marcha, si persistieron los problemas de orden público, hacinamiento y malas condiciones de vida en las prisiones, también cesaron las críticas, reflejo de una sociedad más obcecada en alejar a los elementos “peligrosos”, que en educarse a sí misma para reducir la delincuencia.
Durante la Guerra Civil se ocupó del vestido y alimento del frente de Guadarrama. Como parte de la Comisión de Asistencia Femenina, abrió guarderías, refugios y colonias, y ayudó a la evacuación de los niños durante el primer asedio de Madrid. Continuó evacuando a los refugiados hacia Francia y Latinoamérica entre 1937 y 1939 como Secretaria de la Embajada de España en París. Al no poder huir de la Francia de Vichy por la suspensión de los viajes a México de las compañías de navegación francesas, vivió oculta bajo el seudónimo de Madame Duval para evitar ser extraditada. Retrató este período de su vida su alter ego, Plácido, en Cuatro años en París (1947). Aún allí, creó la Unión de Intelectuales Españoles, trabajó en una editorial y recibió la Cruz de Lorena, que entregaban a las mujeres de la Resistencia.
Una vez en México, fundó la Escuela de Capacitación para el Personal de Prisiones (1949). Marchó a Nueva York en 1950, ya que firmó un contrato con el Departamento de Estudios Sociales de la ONU para investigar sobre el estado de las prisiones femeninas en el mundo y establecer un proyecto de reglamento para estas. Fue también, a propuesta de Félix Gordón Ordás, consejera del Gobierno de la República Española en el exilio para conseguir la entrada de la España republicana en la ONU, si bien dimitió a los dos años. Gracias a la ayuda de la entusiasta hispanista y mecenas de la cultura Louise Crane, con quien vivió hasta su muerte, fundó la revista Ibérica por la Libertad (1954-1974), en la que, durante 22 años de publicación mensual informó de la realidad del franquismo y defendió los ideales democráticos contra la represión política.
No pudo acudir a recibirla, pero un año antes de su muerte se le obsequió con la Gran Cruz de la Orden de San Raimundo de Peñafort del Ministerio de Justicia en reconocimiento a su labor penitenciaria. Aunque no en España, pudo ver alguna vez realizado su anhelo de transformar las cárceles en escuelas, cuando, como visitadora de prisiones que continuó siendo en Estados Unidos (y las visitaría en todo el orbe, y escribiría sobre ellas), pasó por un reformatorio de mujeres de Framingham, y dijo: “sueño que estoy en la residencia de estudiantes de la calle Fortuny, de Madrid, donde residí los años de mi vida como estudiante”.
(Servicio de Información Bibliográfica)
Cronología
Nace en Málaga
Comienza los estudios universitarios de Derecho en la Universidad Central
Ocupa el cargo de Directora General de Prisiones
Es secretaria de la Embajada de España en París
Se publica su novela autobiográfica Quatre ans a Paris, Cuatro años en parís para la edición de Buenos Aires
Se instala en Nueva York, donde vivirá con Louise Crane
Visita España y regresa a Nueva York
Se traslada a Madrid y entra en la Residencia de María de Maeztu
Entra en el Colegio de Abogados de Madrid
Funda el Instituto de Estudios Penitenciarios bajo la dirección de Jiménez de Asúa
Se exilia en México
Funda la Escuela de Capacitación para el Personal de Prisiones en México
Publica la revista Ibérica por la Libertad
Fallece en Nueva York
- Arias Bautista, María Teresa. Victoria Kent Siano. En: Ateneístas ilustres, II. Madrid: Ateneo de Madrid, 2007, p. 369-379.
- Aznar Soler, Manuel; López García, José-Ramón (eds.): «Diccionario bibliográfico de los escritores, editoriales y revistas del exilio republicano de 1939. »Sevilla: Biblioteca del Exilio. Renacimiento, 2016.
- Capel Martínez, Rosa María. Victoria Kent Siano. En: «Progresistas: biografías de reformistas españoles (1808-1939). »Madrid: Taurus, [2006].
- Gargallo Vaamonde, Luis. La excarcelación de presos con Victoria Kent. En: «Coetánea: II Congreso Internacional de Historia de Nuestro Tiempo. »2012, p. 171-186.
- Kent, Victoria. Discurso en las Cortes del 1 de octubre de 1931. «Diario de Sesiones de las Cortes Constituyentes de la República Española,» n. 49, p. 1351-1354.
- Mistral, Gabriela. Victoria Kent. «Atenea,» ISSN 0718-0462, n. 500, 2009, p- 167-173.
- Nuez Sánchez-Casado, Paloma de la. “Victoria Kent Siano”. Diccionario Biográfico Español. Madrid: Real Academia de la Historia.
- Pérez Bustamante, Rogelio. «El siglo de oro de la abogacía española (1838-1936). »[Salamanca?]: Apunto, 2003.
- Ramos Palomo, María Dolores (coord.). «Homenaje a Victoria Kent». [Málaga]: Universidad de Málaga, [1989].
- Sánchez Galindo, Antonio. Victoria Kent (una española universal). En: «Revista Penal México Doctrina, »ISSN: 2007-4700, n. 8, 2015, p. 171-190.
- «Victoria Kent, Directora General de Prisiones. »Portal web del Ayuntamiento de Madrid dedicado a la Cárcel de Ventas.